sábado, 30 de agosto de 2008

SAWADEE KAA

Nos pasamos diciendo hola y gracias (que es kompumkaa) todo el viaje y haciendo reverencias, no aprendimos nada más en tailandés.

Este es un adelanto de las fotos.


Kiosko de cocos


Mi Príncipe en Patton Beach, Pucket




Calle de Bangkok


Phi Phi Island, Pucket

Yo en la boda tailandesa

domingo, 10 de agosto de 2008

HASTA PRONTO

Escribo estas palabritas para despedirme de tod@s.

Espero que todo salga bien, solo tengo miedo a enfermarnos y que no haya remedio en el super botiquín que llevamos.

Estoy ilusionada y expectante. Va a ser un viaje largo y seguro que lleno de sorpresas.

Mi Príncipe ya no existe, ahora duermo con un Agente de Aduanas al lado que solo me deja llevar 4 camisetas, 3 pantalones, 3 vestidos, 2 bikinis y 2 pareos… Mis dos neceseres son innegociables, menos mal.

En mi maxibolso para el viaje tengo el “Cuore” y el “Hola” de esta semana sin leer, que me están quemando…voy a ser el último ser humano en ver a los bebés de Angelina y Brad Pitt y eso me está matando, pero tengo que guardarlos para las 14 horas de avión, así que hasta el martes nada.

Si me mata un tsunami o me pica el dengue (del que no estamos vacunados) mi familia tiene órdenes expresas de repartir mis cenizas en dos: una parte para El Limbo (el bar donde voy a ver los partidos con mi Peña de fútbol) y la otra pal “El Corte Inglés”.

Viajarán todos conmigo pues mi maleta es enorme y va casi vacía, sacaré muchas fotos, contaré a que saben los alacranes fritos y en que consiste una boda tailandesa a mi vuelta.

Besos a todos y hasta pronto…

sábado, 9 de agosto de 2008

MOSTRÁNDOME AL MUNDO





Lo prometido es deuda. Aquí están mi foto con mi vestido rojo para la boda en Tailandia, y los zapatos que tanto me costó encontrar.
Espero que no sean muy críticos, no tengo tiempo para cambiar nada, así que esto es lo que hay...
Ya lo tengo todo listo, mañana haré la maleta y entraré para dejar un post de despedida.

martes, 5 de agosto de 2008

ULTIMANDO DETALLES

No he comprado las maletas para el viaje, no he recogido las pastillas contra la malaria que tengo reservadas en la farmacia desde hace más de un mes, no he comprado el repelente de mosquitos que me recomendaron en Medicina Internacional, no tengo zapatos para la boda ¿no hay zapatos de fiesta azul turquesa en ningún lado del mundo, o qué? Ya estoy pensando en otras alternativas, como taconazos verdes o plateados. Hoy me escaquearé del trabajo un rato y me paso por el todopoderoso Corte Inglés, que he dejado como última y desesperada opción.

El vestido ya lo tengo en casa, y está muy feo que yo lo diga, pero me queda genial. Voy muy española y original. Ya lo veréis, el sábado hay sesión fotográfica. He quedado con mi M.A.G. (mejor amigo gay), con mi hermana (la fotógrafa), con mi amigo Oliver (novio de mi M.A.G. y creador de ese fantástico blog titulado "Que baje Dios y se me lleve" que recomiendo a todo el mundo) Después de ir a la peluquería por la mañana para ir impecable en ese avión y aterrizar cual Kate Moss en Londres, me sacaré las fotos para colgarlas en el blog y exponerme a la opinión pública, a los dimes y diretes, a los "me encanta el traje" o "lo esperaba más bonito". En definitiva, me mostraré al mundo.

Esta tarde a comprar las maletas y a recoger una pamela blanca maravillosa y enorme que me compré en Cortefiel y que me pienso poner el lunes cuando llegue a Heathrow y no voy a quitármela en 15 días. Ya tenemos organizado el botiquín, que es más grande que el baúl de la Piqué y tiene de todo: antibióticos, medicinas para cortar gastroenteritis, relajantes musculares, antiflamatorios, pastillas para dormir en el avión, vitaminas, pomadas, analgésicos y un larguísimo etcétera. Mi suegra es doctora y me hizo miles de recetas. Puede que nos enfermemos, pero llevamos medicación para lo que venga.

La cabeza me va a estallar de todo lo que tengo dentro de ella...¡¡son tantas cosas!! Y debo reconocer que soy de esas mujeres a las que les encanta hacer la maleta en el último momento, pero en este viaje no se puede. Mañana tengo que ir a recoger los cheques de viaje, y las libras para los días que estamos en Londres.

Tengo ganas de llegar a Tailnadia, pero sueño con que sean las dos de la tarde del lunes que viene y llegar con mi Príncipe a London y enseñarle lo que nos de tiempo en una tarde-noche. Lo tengo todo pensado: primero al hotel a dejar las maletas que está en Padington muy cerca de Hyde Park y de Nothing Hill, luego nos meteremos en el metro y lo llevaré al Big Ben, después a Picadilly Circus que es Londres en estado puro para que alucine, finalizaremos la jornada con un cenita en Coven Garden que es uno de mis sitios preferidos.